Las Cataratas Victoria son una de las maravillas naturales más impresionantes del mundo. Situadas en la frontera entre Zambia y Zimbabue, estas espectaculares cascadas de agua son conocidas localmente como «Mosi-oa-Tunya», que significa «el humo que truena». La belleza de las Cataratas Victoria es innegable, y su impacto visual es tan impresionante que fueron nombradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1989.
¿Cómo llegar a las Cataratas Victoria?
Hay varias maneras de llegar a las Cataratas Victoria. Desde Zambia, la ciudad más cercana es Livingstone, que tiene un aeropuerto internacional y una buena infraestructura turística. Desde allí, se puede llegar a las cataratas en coche o en taxi. También es posible llegar en avión a Victoria Falls, en el lado de Zimbabue. El aeropuerto de Victoria Falls cuenta con vuelos internacionales y nacionales, por lo que es una buena opción si se viaja desde otros países africanos.
Una vez en el lugar, hay varias opciones para explorar las Cataratas Victoria. Una de las más populares es el tour en helicóptero, que ofrece vistas panorámicas de las cataratas desde el aire. También se pueden hacer caminatas por los senderos cercanos a las cataratas, para disfrutar de las vistas más de cerca. Además, hay cruceros por el río Zambezi, que permiten disfrutar de las cataratas desde una perspectiva diferente.
¿Qué ver en las Cataratas Victoria?
Las Cataratas Victoria tienen una altura de 108 metros y un ancho de casi dos kilómetros, lo que las convierte en una de las cascadas más grandes del mundo. El ruido de las cataratas es ensordecedor y la niebla que se eleva en el aire puede verse desde varios kilómetros de distancia.
Uno de los puntos más impresionantes para ver las Cataratas Victoria es el Puente de Victoria Falls, que conecta Zambia y Zimbabue. Desde allí, se puede apreciar una vista espectacular de la garganta del río Zambezi y de las cataratas en todo su esplendor.
Otro lugar interesante es la isla de Livingstone, en la parte superior de las cataratas. Desde allí, se puede caminar hasta el borde de las cataratas y disfrutar de vistas impresionantes de la caída de agua. Además, se puede visitar la piscina natural llamada «Devil’s Pool», ubicada en el borde de las cataratas, donde los turistas más aventureros pueden bañarse en las aguas cristalinas a pesar de la impresionante caída de agua.
Conclusión
En definitiva, las Cataratas Victoria son una experiencia única que ningún amante de los viajes debería perderse. Su belleza natural y su impacto visual son impresionantes, y la diversidad de actividades que se pueden realizar en el lugar las convierte en un destino ideal para aquellos que buscan aventura y emoción. No te lo pienses más y reserva tu viaje a las Cataratas Victoria, no te arrepentirás.